Historia de Nirvana

Nirvana (Aberdeen, Washington, 1987 – 1994) fue una de las bandas de más corto recorrido y al mismo tiempo de las más influyentes en el rock de finales del siglo XX, precursora, además, del movimiento grunge.

Fundada por el vocalista y compositor Kurt Cobain (este ya había tenido su propia banda, Fecal Matter) y por el bajista Kirst Novoselic, que se habían conocido en el instituto, el grupo dio sus primeros pasos con Bob McFadden a la batería, un proyecto que duraría solo un mes. Tras este primer intento, los dos miembros fundadores reclutaron a Aaron Burckhard como batería y volvieron a probar suerte con nuevo material.

En un primer momento, el grupo barajó varios nombres como Skid Row, Bliss o Pen Cap Chew, decantándose finalmente por Nirvana, sugerencia de Cobain, quien pensó en ese nombre buscando algo que “sonara simple, bonito y agradable, fuera de lo común”. Pero ya con el nombre elegido, Cobain y Novoselic se mudaron a Washington, perdiendo el contacto con su batería. Con el puesto de nuevo vacante, ambos publicaron un anuncio en el periódico en busca de un nuevo músico, siendo Chan Channing el elegido.

El trío lanzó su álbum debut, Bleach, de la mano de la discográfica Sub Pop a finales de 1988, un conjunto de canciones que rápidamente obtuvo una alta popularidad en las radios universitarias de los Estados Unidos y vendió 40.000 copias, todo ello sin ningún tipo de promoción por parte de su discográfica. Gracias a esta incipiente fama, el grupo realizó su primera gira nacional.

Llegado el año 1990 la banda volvería a los estudios de grabación junto al productor Butch Vig para trabajar en las canciones de su siguiente disco, Nevermind. Durante esta época surgieron desavenencias entre los dos fundadores y su batería por los constantes fallos que este cometía, razón por la que su relación musical finalizaría en favor del ex batería del grupo hardcore Scream, Dave Grohl, que pasó a formar parte de Nirvana. No fue este el único cambio en el grupo, que también firmó un contrato con una nueva discográfica, DGC Records, con la que finalmente Nevermind vio la luz bajo la producción de Butch Vig, quien posteriormente sería batería de la banda Garbage.

El resultado del disco, que no fue del agrado total del grupo dados los arreglos realizados por Andy Wallace para suavizar un sonido demasiado oscuro, no pudo obtener un mejor resultado: su primer sencillo, Smells like teen spirit, se hizo enormemente popular en las radios del país y, junto a otros temas como Lithium, Come as you are o In Bloom, lograron que el álbum vendiese 400.000 copias, superando así las expectativas de 250.000 de su discográfica.

Este sería el comienzo del despegue del género grunge y, por consiguiente, de Nirvana, que seis meses después del lanzamiento de Nevermind ya habían alcanzado los 12 millones de copias vendidas a nivel mundial, es decir, un disco de triple platino, así como los premios MTV a Mejor vídeo alternativo y Mejor artista nuevo.

A finales de ese mismo año, Nirvana grabó un acústico para la MTV sin la presencia de instrumentos eléctricos, algo que dejó al descubierto la calidad musical de las composiciones del grupo, que vivía sin saberlo sus últimos meses de vida. Y es que, inmersos en una gira por Europa durante el año siguiente, Kurt Cobain comenzó a ser víctima de sus abusos de las drogas, hasta el punto de quedarse inconsciente en un hotel y tener que cancelar la gira. De vuelta en Estados Unidos, ingresó en un centro de desintoxicación en el que tan solo aguantó una semana, tras la que sería encontrado sin vida en su domicilio de Seattle el 8 de abril de 1994 a causa de su suicidio por arma de fuego, pasando a formar parte del conocido como Club de los 27, del que forman parte aquellos artistas fallecidos a esa edad.

Terminaba así la historia de la banda que, a pesar de la muerte de Cobain, continúa siendo popular hoy en día. Una banda legendaria que cuenta en su haber con más de 50 millones de copias vendidas de sus álbumes y que forma parte del Salón de la Fama del Rock and Roll desde 2014.